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Qué es El libro de Urantia?
Publicado en 1955 por la Fundación Urantia, El libro de Urantia describe un destino eterno para la humanidad y enseña que la fe viva y el servicio por amor son las claves para el progreso espiritual personal y la supervivencia eterna. También describe el plan de Dios para la evolución progresiva de los individuos, de la sociedad humana y del universo en su conjunto.
Últimas noticias
¿Cómo mantengo la fe en una crisis?
La conciencia de una vida humana victoriosa en la tierra nace de esa fe de la criatura que se atreve a desafiar cada recurrente episodio de la existencia cuando se enfrenta con el pavoroso espectáculo de las limitaciones humanas, con la firme declaración: aunque yo no pueda hacer esto, en mí vive alguien que puede y que lo hará, una parte del Padre-Absoluto del universo de los universos. Y ésa es «la victoria que sobrecoge al mundo, aun vuestra fe». ~ El libro de Urantia, 4:4:9 (59.5)
Pero mucho antes de llegar a Havona, esos hijos ascendentes del tiempo han aprendido a disfrutar de la incertidumbre, alimentarse de la desilusión, entusiasmarse frente a la derrota aparente, vigorizarse en presencia de dificultades, exhibir valor indomable frente a la inmensidad, y ejercer una fe inconquistable al enfrentarse con los desafíos de lo inexplicable. Por mucho tiempo, el grito de batalla de estos peregrinos ha sido: «Juntamente con Dios, nada —absolutamente nada— es imposible». ~ El libro de Urantia, 26:5.3 (291.3)
Aunque resulte muy difícil reconciliar las dudas científicas sobre la eficacia de la oración con el impulso siempre presente de buscar ayuda y guía de las fuentes divinas, no olvidéis jamás que la oración de fe sincera es una fuerza poderosa para la promoción de la felicidad personal, del autocontrol individual, de la armonía social, del progreso moral y del logro espiritual. ~ El libro de Urantia, 91:6:3 (999.6)
Jesús ilustró la profunda seguridad del mortal conocedor de Dios cuando dijo: «Para un creyente del reino quien conoce a Dios, ¿que importa si todas las cosas terrenales se arruinan?» Las seguridades temporales son vulnerables, pero las certezas espirituales son impregnables. Cuando las mareas de la adversidad humana, el egoísmo, la crueldad, el odio, la maldad y los celos golpean el alma mortal, podéis reposar en la seguridad de que existe un bastión interior, la citadela del espíritu, que es absolutamente inatacable; por lo menos es verdad de cada ser humano que ha encomendado el mantenimiento de su alma al espíritu residente del Dios eterno. ~ El libro de Urantia, 100:2.7 (1096.4)
¿Cómo lidio con la decepción?
En el Paraíso, la desilusión no se considera nunca una derrota; el postergamiento nunca se mira como una desgracia; los fracasos aparentes del tiempo no se confunden jamás con los atrasos significativos de la eternidad. ~ El libro de Urantia, 26:8.3 (294.2)
Los individuos conocedores de Dios no se desalientan por la desgracia ni se deprimen por las desilusiones. Los creyentes son inmunes a la depresión consiguiente a los cataclismos puramente materiales; los que viven en el espíritu no están perturbados por los episodios del mundo material. Los candidatos para la vida eterna practican una técnica vigorizante y constructiva para enfrentarse a todas las vicisitudes y todos los agobios de la vida mortal. Cada día que vive un verdadero creyente, encuentra más fácil hacer lo que es recto. ~ El libro de Urantia, 156:5.13 (1739.8)
Pero la vida será una carga pesada a menos que aprendas a enfrentar los fracasos con donaire. Es un arte aceptar las derrotas, y las almas nobles siempre lo adquieren; debes saber cómo perder, sin perder el ánimo; no debes temer el desencanto. No vaciles jamás en admitir el fracaso. No intentes ocultar el fracaso bajo sonrisas engañosas y falso optimismo. Suena bien pretender tener siempre éxito, pero los resultados finales son desastrosos. Tal técnica conduce directamente a la creación de un mundo de irrealidad y al choque inevitable del desencanto final. ~ El libro de Urantia, 160:4.13 (1779.5)
¡Cuán aplastante es el desencanto en la vida de aquellas personas necias que, porque fijan sus anhelos en las atracciones tenebrosas y desvanecientes del tiempo, se ciegan a las aspiraciones más altas y más reales de los alcances duraderos de los mundos eternos de valores divinos y realidades verdaderamente espirituales. ~ El libro de Urantia, 177:4:10 (1926.3)
Jesús ilustró la profunda seguridad del mortal conocedor de Dios cuando dijo: «Para un creyente del reino quien conoce a Dios, ¿que importa si todas las cosas terrenales se arruinan?» ~ El libro de Urantia, 100:2:7 (1096.4)
¿Cómo encuentro a Dios?
Jesús le dijo: «Si realmente quieres encontrar a Dios, ese deseo es en sí prueba de que ya lo has encontrado.»
~ El libro de Urantia, 130:8.2 (1440.2)
El mundo está lleno de almas que se mueren de hambre en la presencia misma del pan de la vida; los hombres mueren buscando a Dios, sin ver que él mora en ellos.
~ El libro de Urantia, 159:3.8 (1766.4)
«El verdadero Dios no está lejos; es parte de nosotros; su espíritu habla desde dentro de nosotros».
~ El libro de Urantia, 3:1.4 (45.2)
Si sigues la guía, de que no eres consciente, de este espíritu inmortal, estarás seguro de continuar en el camino elevado del hallazgo de Dios. Y cuando hayas alcanzado al Padre en el cielo, será porque buscándole te habrás hecho cada vez más semejante a él.
~ El libro de Urantia, 133:4.9 (1475.2)
¿Qué significa ser salvo?
Por el amor de Dios y por su misericordia seremos salvados. ~ El libro de Urantia, 131:1:7 (1443.3)
Por tanto «cualquiera que invocare el nombre del Señor será salvado», «porque él perdona abundantemente». ~ El libro de Urantia, 2:4:1 (38.1)
Por la fe estáis justificados; por la fe sois salvados; y por la misma fe avanzaréis eternamente en el camino de la perfección progresiva y divina. ~ El libro de Urantia, 150:5:3 (1682.5)
La salvación humana es real; está basada en dos realidades que pueden ser captadas por la fe de la criatura e incorporarse de esa manera a la experiencia humana de cada individuo: el hecho de la paternidad de Dios y su verdad correlacionada, la hermandad del hombre. ~ El libro de Urantia, 188:4:13 (2017.8)
Cuando sabéis que os salva la fe, tendréis paz verdadera con Dios. Y todos los que sigan el camino de esta paz celestial están destinados a ser santificados al servicio eterno de los hijos del Dios eterno, hijos en constante progreso. ~ El libro de Urantia, 143:2:6 (1610.1)
¿Que pasa cuando morimos?
La muerte mortal es una técnica de escape de la vida material en la carne; y la experiencia en los mundos de estancia de vida progresiva a través de siete esferas de capacitación correctiva y educación cultural representa la introducción de los sobrevivientes mortales a la carrera morontial, la vida de transición que interviene entre la existencia material evolucionaria y el logro espiritual más elevado de los seres ascendentes del tiempo que están destinados a lograr las puertas de la eternidad. ~ El libro de Urantia, 47:10.7 (540.3)
Comienzas allí donde te interrumpes aquí. ~ El libro de Urantia, 47:3.7 (533.5)
«Vosotros os regocijáis de saber que el Hijo del Hombre ha resucitado de entre los muertos porque así sabéis que vosotros y vuestros hermanos también sobreviviréis al fallecimiento mortal. Pero esa sobrevivencia depende de que hayáis nacido primero del espíritu de búsqueda de la verdad y descubrimiento de Dios». ~ El libro de Urantia, 193:2.2 (2054.3)
«Y cuando el trabajo aquí haya terminado, tú servirás conmigo en lo alto». ~ Jesús, El libro de Urantia, 192:2.10 (2049.1)
¿Iré al cielo?
Las llaves del reino de los cielos son: sinceridad, más sinceridad, y más sinceridad. Todos los hombres poseen estas llaves. ~ El libro de Urantia, 9:4:14 (435.7)
Comienzas allí donde te interrumpes aquí. ~ El libro de Urantia, 47:3.7 (533.5)
Jesús dijo: «En la casa de mi Padre muchas moradas hay». ~ El libro de Urantia, 30:4:17 (341.7)
La palabra cielo tal como a veces se la ha utilizado en Urantia, significa en ocasiones estos siete mundos de estancia, siendo el primer mundo de estancia denominado primer cielo, y así sucesivamente hasta el séptimo. ~ El libro de Urantia, 15:7.5 (174.5)
¿Que es el pecado?
El mal es inherente al orden natural de este mundo, pero el pecado es una actitud de rebelión consciente que fue traída a este mundo por los que cayeron de la luz espiritual a las profundísimas tinieblas. ~ El libro de Urantia, 148:4.6 (1660.5)
«El pecado es la transgresión consciente, conocedora y deliberada de la ley divina, la voluntad del Padre. El pecado es la medida de la renuencia a la guía divina y a la dirección espiritual.» ~ Jesús, El libro de Urantia, 148:4.4 (1660.3)
La posibilidad de un juicio erróneo (el mal) se convierte en pecado sólo cuando la voluntad humana apoya conscientemente y adopta a sabiendas un juicio deliberadamente inmoral. ~ El libro de Urantia, 3:5.15 (52.1)
Hace falta carácter magnánime y noble para retomar el camino recto después de haber empezado mal. Muchas veces la mente tiende a justificar el seguir por el camino del error después de entrar en él. ~ El libro de Urantia, 184:2.12 (1981.6)
¿Deberíamos tener miedo?
«No temáis» era su consigna, y aguantar con paciencia era su ideal de la fortaleza de carácter. ~ El libro de Urantia, 140:8:20 (1582.1)
El miedo y la ira debilitan el carácter y destruyen la felicidad. ~ El libro de Urantia, 140:5:6 (1573.8)
Jesús decía: «Tened ánimo; soy yo; no temáis». ~ El libro de Urantia, 152:4:2 (1703.2)
«Pero no temáis, todo el que desee sinceramente entrar en el reino de Dios y encontrar la vida eterna encontrará en verdad la salvación sempiterna.» ~ El libro de Urantia, 166:3:5 (1829.2)
«No temáis que el mal se os resista pues yo estoy siempre con vosotros hasta el fin de los tiempos.» ~ El libro de Urantia, 191:4:4 (2042.1) (1599.14)
¿Qué es el alma?
Desde sus comienzos más tempranos el alma es real; tiene cualidades cósmicas de sobrevivencia. ~ El libro de Urantia, 16:9.2 (195.8)
«El espíritu divino llega simultáneamente con la primera actividad moral de la mente humana, y esa es la ocasión del nacimiento del alma.» ~ Jesús, El libro de Urantia, 133:6.5 (1478.4)
Todos los humanos que evolucionan un alma son literalmente los hijos evolucionarios de Dios el Padre y de Dios la Madre, el Ser Supremo. Pero hasta el momento en que el hombre mortal se vuelve consciente en el alma de su herencia divina, debe comprender por la fe esta seguridad del parentesco con la Deidad. ~ El libro de Urantia, 117:6.8 (1289.1)
La supervivencia de las criaturas mortales se basa enteramente en la evolución de un alma inmortal dentro de la mente mortal. ~ El libro de Urantia, 36:6.5 (404.3)
La supervivencia eterna de la personalidad depende completamente de la elección de la mente mortal, cuyas decisiones determinan el potencial de supervivencia del alma inmortal. Cuando la mente cree en Dios y el alma conoce a Dios, y cuando, y con el Ajustador ayudante, todos ellos desean a Dios, entonces la supervivencia es segura. ~ El libro de Urantia, 5:5.13 (69.8)
¿Son reales los ángeles?
Los ángeles son los sirvientes espirituales en el cielo. ~ El Libro de Urantia, 167:7.3 (1841.2)
La enseñanza sobre los ángeles guardianes no es un mito; Ciertos grupos de seres humanos en realidad tienen ángeles personales. Fue en reconocimiento de esto que Jesús, hablando de los hijos del reino celestial, dijo: “Mirad que no despreciéis a uno de estos pequeños, porque os digo que sus ángeles contemplan siempre la presencia del espíritu. de mi Padre”. ~ El Libro de Urantia, 113:1.1 (1241.3)
El guardián del destino influye en ti de todas las formas posibles compatibles con la dignidad de tu personalidad; Bajo ninguna circunstancia estos ángeles interfieren en la libre acción de la voluntad humana. ~ El Libro de Urantia, 113:5.1 (1245.7)
¿Pueden coexistir la religión y la ciencia?
Dios es para la ciencia una causa; para la filosofía, una idea; para la religión, una persona, incluso el amante Padre celestial. Dios es para el científico una fuerza primordial; para el filósofo, una hipótesis de unidad; para el religioso, una experiencia espiritual viviente. ~ El libro de Urantia, 1:6.2 (30.1)
La verdad es la base de la ciencia y la filosofía, y ofrece el cimiento intelectual para la religión. La belleza patrocina el arte, la música y los ritmos significativos de toda experiencia humana. La bondad comprende el sentido de la ética, moralidad y religión —hambre de perfección experiencial. ~ El libro de Urantia, 56:10.10 (647.1)
La ciencia debería hacer para el hombre, materialmente, lo que la religión hace por él espiritualmente: extender el horizonte de la vida y ampliar su personalidad. La verdadera ciencia no puede mantenerse en desacuerdo con la verdadera religión. El «método científico» es simplemente una vara intelectual con el cual se miden las aventuras materiales y los logros físicos. Pero, como es material y totalmente intelectual, es completamente inútil en la evaluación de las realidades espirituales y de las experiencias religiosas. ~ El libro de Urantia, 195:7:2 (2078.5)
La ciencia trata de los hechos; la religión se preocupa tan sólo de los valores. Mediante la filosofía esclarecida la mente intenta unir los significados tanto de hechos como de valores, llegando así a un concepto completo de realidad. Recordad que la ciencia es el dominio del conocimiento, la filosofía el reino de la sabiduría, y la religión la esfera de la experiencia de la fe. ~ El libro de Urantia, 101:5:2 (1110.5)
¿Quién creó nuestro universo?
El Padre Universal no es el creador personal del universo local de Nebadon; el universo en el cual vosotros vivís es la creación de su Hijo Micael. ~ El libro de Urantia, 1:2:9 (24.7)
Para los hijos de un universo local un Hijo Micael es, para todos los fines y propósitos prácticos, Dios. ~ El libro de Urantia, 5:3.6 (66.2)
Nuestro Hijo Creador es la personificación del concepto original 611.121 de identidad infinita de origen simultáneo en el Padre Universal y el Hijo Eterno. El Micael de Nebadon es el «Hijo unigénito» que personaliza el 611.121 concepto universal de divinidad e infinitud. ~ El libro de Urantia, 33:1:1 (366.2)
Josué ben José, el niño judío, fue engendrado y nació en el mundo tal como cualquier otro bebé antes y desde entonces, excepto que este bebé en particular fue la encarnación de Micael de Nebadon, un Hijo divino Paradisiaco y el Creador de este entero universo local de cosas y seres. Y este misterio del autootorgamiento de la Deidad dentro de la forma humana de Jesús, por otra parte de origen natural en el mundo, permanecerá por siempre sin solución. ~ El libro de Urantia, 119:7:5 (1317.1)
Jesús llegó con la idea de una generosidad activa y espontánea, un amor por los semejantes tan genuino que expandía el concepto de vecino hasta incluir al mundo entero, tornando en vecinos por lo tanto a todos los hombres. ...Enseñó comprensión pura, compasión. Micael de Nebadon es un Hijo dominado por la misericordia; la compasión es su naturaleza propia. ~ El libro de Urantia, 140:8:11 (1580.6)
¿Cómo comenzó la vida en la Tierra?
Hace 600.000.000 de años la comisión de Portadores de Vida enviada de Jerusem llegó a Urantia y empezó el estudio de las condiciones físicas, preparatorio para originar la vida en el mundo número 606 del sistema de Satania. ~ El libro de Urantia, 58:1.1 (664.2)
El que nos llamemos Portadores de Vida no debe confundiros. Podemos portar vida a los planetas y lo hacemos, pero no trajimos vida alguna a Urantia. La vida en Urantia es única, original con el planeta. Esta esfera es un mundo de modificación de vida; toda vida que aparece sobre ella la formulamos aquí mismo en el planeta; y no hay otro mundo en toda Satania, ni siquiera en todo Nebadon, que tenga una existencia vital exactamente tal como la de Urantia. ~ El libro de Urantia, 58:4.1 (667.5)
Los Portadores de Vida satanianos habían proyectado un modelo de vida a base de cloruro de sodio; por tanto no se podía hacer gestión alguna para su implantación hasta tanto las aguas del océano se hicieran suficientemente salobres. El tipo urantiano de protoplasma no puede funcionar más que en una solución salina adecuada. Toda vida atávica, tanto —vegetal como animal— evolucionó en un medio de solución salina. Incluso los animales terrestres superiormente organizados no podrían continuar viviendo, de no circular esta misma solución esencial por su cuerpo en la corriente sanguínea que libremente baña, literalmente sume, cada minúscula célula viviente en estas «profundidades marinas». ~ El libro de Urantia, 58:1.3 (664.4)
Una vez que los Portadores de Vida han diseñado los modelos originales de la vida, después de haber organizado los sistemas de energía, allí debe ocurrir un fenómeno adicional; se debe impartir el «aliento de vida» a estas formas sin vida. Los Hijos de Dios pueden construir las formas de la vida, pero es el Espíritu de Dios el que realmente contribuye con la chispa vital. ~ El libro de Urantia, 36:6.4 (404.2)
Hace 550.000.000 de años el cuerpo de Portadores de Vida retornó a Urantia. En cooperación con los poderes espirituales y las fuerzas superfísicas, organizamos e iniciamos los modelos originales de vida de este mundo y los plantamos en las acogedoras aguas del ámbito. Toda vida planetaria (aparte de las personalidades extraplanetarias) hasta los tiempos de Caligastia, el Príncipe Planetario, tuvo su origen en nuestras tres implantaciones de vida marina, originales, idénticas y simultáneas. Estas tres implantaciones de vida se han designado como: la central eurasiático-africana, la oriental australasiática, y la occidental, englobando Groenlandia y las Américas. ~ El libro de Urantia, 58:4.2 (667.6)
Hace 450.000.000 de años aconteció la transición de la vida vegetal a la animal. Esta metamorfosis se verificó en las aguas poco profundas de las abrigadas bahías y calas tropicales de las extensas costas de los continentes que se iban separando. Y este acontecimiento, todo el cual era inherente a los modelos originales de vida, se produjo de manera paulatina. Hubo muchas etapas de transición entre las formas primitivas iniciales de vida vegetal y los organismos animales posteriores, bien definidos. Aun hoy persisten los mohos de limo de la transición, y no pueden clasificarse ni como planta ni como animal. ~ El libro de Urantia, 58:6.1 (669.2)
¿Es especial nuestro planeta?
En vuestro superuniverso no existe un planeta frío en cuarenta que sea habitable por seres de vuestra orden. ~ El libro de Urantia, 15:6:15 (173.5)
Vuestro sol vierte verdaderos torrentes de rayos mortíferos a raudales, y vuestra vida amena en Urantia se debe a la influencia «fortuita» de más de dos veintenas de operaciones protectoras, aparentemente casuales, similares a la acción de esta capa de ozono única. ~ El libro de Urantia, 58:2:4 (666.1)
La evolución —en Urantia y en otras partes— siempre entraña un propósito y no es nunca fortuito. ~ El libro de Urantia, 65:0:7 (730.7)
Vuestro pequeño e insignificante planeta es de importancia para el universo local, simplemente porque es el hogar mortal de Jesús de Nazaret. ~ El libro de Urantia, 20:5:5 (228.2)
¿Los humanos evolucionaron o fueron creados?
La evolución es la regla del desarrollo humano, pero el progreso mismo varía grandemente en los distintos mundos. ~ El libro de Urantia, 49:1.4 (560.3)
El desarrollo de organismos más elevados a partir de las agrupaciones más bajas de vida no es accidental. ~ El libro de Urantia, 49:1.7 (560.6)
El hecho de evolución no es un descubrimiento moderno, los antiguos comprendían el carácter lento y evolucionario del progreso humano. ~ El libro de Urantia, 74:8.5 (837.4)
La física y la química solas no pueden explicar cómo el ser humano evolucionó a partir del protoplasma primitivo de los primeros mares. ~ El libro de Urantia, 65:6.8 (738.1)
Ahora pues, tras casi novecientas generaciones de desarrollo, abarcando alrededor de veintiún mil años desde el origen de los mamíferos protohumanos, los primates, súbitamente, dieron a luz a dos asombrosas criaturas, los primeros verdaderos seres humanos. ~ El libro de Urantia, 62:4:6 (707.5)
¿Quiénes fueron los primeros humanos?
Desde 1934 d. de J.C., retrocediendo al nacimiento de los primeros seres humanos, han pasado 993.419 años. ~ El libro de Urantia, 62:5.1 (707.7)
SE REGISTRÓ Urantia como mundo habitado cuando los dos primeros seres humanos, los gemelos, tenían once años, y antes de que llegaran a ser los padres del primogénito de la segunda generación de los verdaderos seres humanos. ~ El libro de Urantia, 63:0.1 (711.1)
Estas dos notables criaturas fueron verdaderos seres humanos. Contaban con dedos pulgares perfectamente humanos, como los habían tenido muchos de sus antepasados, y tenían los pies tan perfectos como los de las razas humanas presentes. ~ El libro de Urantia, 62:5.2 (707.8)
Muchas emociones nuevas aparecieron tempranamente en estos gemelos humanos. Manifestaban admiración tanto por los objetos como por otros seres y exhibían considerable vanidad. Pero el adelanto más extraordinario en el desarrollo emocional fue la aparición repentina de un grupo de sentimientos nuevos que eran realmente humanos: el grupo dado a la adoración, que comprendía el pavor, la reverencia, la humildad, e incluso una forma primitiva de gratitud. El temor, junto con el desconocimiento de los fenómenos naturales, está a punto de dar a luz la religión primitiva. ~ El libro de Urantia, 62:5.4 (708.2)
Andón y Fonta tuvieron diecinueve hijos en total, y vivieron para disfrutar de la compañía de casi media centena de nietos y media docena de biznietos. ~ El libro de Urantia, 63:3.2 (713.2)
¿Hay otra vida inteligente en el universo?
Las miríadas de sistemas planetarios se formaron para que finalmente las habitaran muchos tipos diferentes de criaturas inteligentes, seres que pudieran conocer a Dios, recibir el afecto divino, y amarle a su vez. El universo de universos es la obra de Dios y la morada de sus diversas criaturas. «Dios creó los cielos y formó la tierra; estableció el universo y no creó este mundo en vano; para que fuera habitado lo creó». ~ El libro de Urantia, 1:0:2 (21.2)
Una variedad casi infinita de criaturas y otras manifestaciones vivientes caracteriza los incontables mundos del espacio. Existen sin embargo ciertos puntos de similaridad en un grupo de mundos asociados de un sistema específico, mientras que también existe un modelo universal de vida inteligente. ~ El libro de Urantia, 15:6:16 (173.6)
Yo tan sólo puedo daros el número aproximado de planetas habitados o habitables, porque algunos universos locales tienen más mundos adecuados para la vida inteligente que otros. ~ El libro de Urantia, 15:2:0 (165.6)
Durante las etapas más primitivas y las posteriores de muchos planetas, los seres de vuestra orden presente no podrían existir; cuando los factores de respiración de un planeta son muy elevados o muy bajos, pero cuando todos los demás prerrequisitos para la vida inteligente son adecuados, los Portadores de Vida a menudo establecen en dichos mundos una forma modificada de existencia mortal, seres que son capaces de efectuar sus intercambios del proceso vital directamente mediante la energía de luz y las transmutaciones de poder primarias, efectuadas por los Controladores Físicos Decanos. ~ El libro de Urantia, 49:2:24 (563.1)
¿Quién es Jesús?
Jesús es el lente espiritual en semejanza humana que hace visible a la criatura material a Aquél que es invisible. Él es vuestro hermano mayor que, en la carne, hace que vosotros conozcáis un Ser de atributos infinitos a quien ni siquiera las huestes celestiales pueden suponer comprender plenamente. ~ El libro de Urantia, 169:4.13 (1857.4)
Jesús es en verdad un salvador en el sentido de que su vida y su muerte atraen a los hombres a la bondad y a la sobrevivencia recta. Jesús ama tanto a los hombres que este amor despierta la respuesta amorosa en el corazón humano. ~ El libro de Urantia, 188:5.2 (2018.1)
Jesús es la senda nueva y viviente que va del hombre a Dios, desde lo parcial hasta lo perfecto, de lo terrenal a lo celestial, del tiempo a la eternidad. ~ El libro de Urantia, 129:4.7 (1425.6)
«Yo soy el pan de la vida.
Yo soy el agua viva.
Yo soy la luz del mundo.
Yo soy el anhelo de todas las eras.
Yo soy la puerta abierta a la salvación eterna.
Yo soy la realidad de la vida sin fin.
Yo soy el buen pastor.
Yo soy el camino a la perfección infinita.
Yo soy la resurrección y la vida.
Yo soy el secreto de la sobrevivencia eterna.
Yo soy el camino, la verdad y la vida.
Yo soy el Padre infinito de mis hijos finitos.
Yo soy la verdadera vid, vosotros sois las ramas.
Yo soy la esperanza de todos los que conocen la verdad viva.
Yo soy el puente vivo entre un mundo y otro.
Yo soy el vínculo vivo entre tiempo y eternidad». ~ Jesús, El libro de Urantia, 182:1.10 (1965.4)
¿Resucitó Jesús en realidad?
Mucho hay sobre la resurrección de Jesús que nosotros no comprendemos. Pero sí sabemos que ocurrió tal como lo hemos declarado y aproximadamente a la hora indicada. ~ El libro de Urantia, 189:1:4 (2021.3)
A las tres menos diez, comenzaron a emanar del nuevo sepulcro de José intensas vibraciones de actividades materiales y morontiales combinadas, y dos minutos después de las tres este domingo por la mañana, 9 de abril del año 30 d. de J.C., la forma y personalidad morontial resucitada de Jesús de Nazaret salió del sepulcro. ~ El libro de Urantia, 189:1:1 (2020.4)
Su cuerpo material o físico no fue parte de la personalidad resurgida. Cuando Jesús salió de la tumba, sus restos carnales permanecieron sin cambios en el sepulcro. El emergió del sepulcro, sin desplazar las piedras que cerraban la entrada y sin romper los sellos de Pilato. ~ El libro de Urantia, 189:1:7 (2021.6)
Salió de esta tumba de José en la misma semejanza de las personalidades morontiales de los que, como seres ascendentes morontiales resucitados, emergen de las salas de resurrección del primer mundo de estancia de este sistema local de Satania. ~ El libro de Urantia, 189:1:9 (2021.8)
El primer acto de Jesús al levantarse de la tumba fue saludar a Gabriel e instruirlo que continuara con el cargo ejecutivo de los asuntos del universo bajo Emanuel. Jesús dijo las primeras palabras de su carrera postmortal. «Habiendo completado mi vida en la carne, deseo permanecer aquí por un corto período de transición, para poder conocer más plenamente la vida de mis criaturas ascendentes y revelar ulteriormente la voluntad de mi Padre en el Paraíso». ~ El libro de Urantia, 189:1:10 (2022.1)
¿Qué dijo Jesús sobre el amor?
«Al regocijaros en vuestra lealtad al evangelio, orad al Padre de la verdad para que os otorgue en vuestro corazón un amor nuevo y más grande por vuestros hermanos. Debéis amar a todos los hombres, así como yo os he amado; debéis servir a todos los hombres, así como yo os he servido». ~ Jesús, El libro de Urantia, 191:4.3 (2041.6)
«La aceptación de la doctrina de la paternidad de Dios implica que también aceptéis libremente la verdad asociada de la hermandad del hombre. Si el hombre es tu hermano, él es aun más que tu prójimo, a quien el Padre exige que ames como a ti mismo». ~ Jesús, El libro de Urantia, 193:1.2 (2053.4)
«Dedica tu vida a la demostración de que el amor es la cosa más grande del mundo. Es el amor de Dios el que impulsa a los hombres a buscar la salvación. El amor es el antecesor de toda bondad espiritual, la esencia de lo verdadero y de lo bello». ~ Jesús, El libro de Urantia, 192:2.1 (2047.5)
«Dejad que vuestro corazón esté tan dominado por el amor, que el espíritu guía pueda con poca dificultad libraros de la tendencia a dejaros llevar por esas explosiones de ira animal que son inconsistentes con el estado de filiación divina.» ~ Jesús, El libro de Urantia, 149:4.2 (1673.2)
«...la exhortación de amar a Dios en forma suprema y a vuestro prójimo como a vosotros mismos. Esta suprema ley de amor hacia Dios y hacia el hombre es la que yo también os declaro, como el deber total del hombre». ~ Jesús, El libro de Urantia, 142:3.22 (1599.14)
¿Jesús tenía hermanos y hermanas?
Durante toda esa noche María estaba inquieta, de manera que ninguno de los dos durmió mucho. Al alba los dolores de parto ya se habían evidenciado, y al mediodía del 21 de agosto del año 7 a. de J.C., con la ayuda tierna de otras viajeras, María dio a luz un niño varón. Jesús de Nazaret había nacido en el mundo, se le envolvió en ropas que María había traído por precaución, y se le puso en el pesebre cercano. ~ El libro de Urantia, 122:8:1 (1351.5)
El próximo acontecimiento importante en la vida de esta familia de Nazaret fue el nacimiento del segundo niño, Santiago, ocurrido al alba del 2 de abril del año 3 a. de J.C. ~ El libro de Urantia, 123:1:5 (1357.2)
En este año, el año 2 a. de J.C., poco antes de su quinto cumpleaños, Jesús tuvo la gran alegría de la llegada de su hermana Miriam, que nació durante la noche del 11 de julio. ~ El libro de Urantia, 123:2.3 (1357.7)
El cuarto hijo de la familia de Nazaret, José, nació el miércoles 16 de marzo del año 1 d. de J.C. ~ El libro de Urantia, 123:4:9 (1362.1)
Su tercer hermano, Simón, nació por la tarde del viernes 14 de abril de este año, el 2 d. de J.C. ~ El libro de Urantia, 123:6:7 (1365.2)
Su tercer hermano, Simón, nació por la tarde del viernes 14 de abril de este año, el 2 d. de J.C. ~ El libro de Urantia, 124:1:7 (1367.3)
Durante la noche del miércoles 24 de junio del año 5 d. de J.C., nació Judá. ~ El libro de Urantia, 124:3:4 (1370.2)
Durante la noche del domingo del 9 de enero del año 7 d. de J.C. nació su hermanito Amós. ~ El libro de Urantia, 124:5:2 (1373.2)
El miércoles 17 de abril del año 9 d. de J.C., por la noche, nació Ruth, la más pequeña de la familia. ~ El libro de Urantia, 126:3:2 (1389.5)
¿Qué dijo Jesús sobre la Regla de Oro?
Desde el Sermón del monte hasta el discurso de la Última cena, Jesús enseñó a sus seguidores a manifestar amor paterno en vez de amor fraterno. El amor fraterno significa amar al prójimo como a uno mismo, y esto sería el cumplimiento adecuado de la «regla de oro». Pero el afecto paterno requiere que ames a tus semejantes como Jesús te ama a ti. ~ El libro de Urantia, 140:5:1 (1573.3)
La regla de oro tal como Jesús la rerradactó exige un activo contacto social; la antigua regla negativa podía ser obedecida en la soledad. Jesús liberó la moral de todas las reglas y ceremonias y la elevó a niveles majestuosos de pensamiento espiritual y de vida verdaderamente recta. ~ El libro de Urantia, 140:10:5 (1585.3)
Y cuando estos mortales conducidos por el espíritu se dan cuenta del verdadero significado de esta regla de oro, se llenan más de plenamente de la certeza de la ciudadanía en un universo cordial, y sus ideales de realidad espiritual son satisfechos sólo cuando aman a sus semejantes tal como Jesús nos amó a todos nosotros, y ésa es la realidad de la comprensión del amor de Dios. ~ El libro de Urantia, 180:5:8 (1950.3)
Ésta es la esencia de la verdadera religión: amar a vuestro prójimo como a vosotros mismos. ~ El libro de Urantia, 180:5:7 (1950.2)
¿Cuál es el valor de la vida familiar?
Casi todo lo que es de valor duradero en la civilización tiene sus raíces en la familia. La familia fue el primer grupo pacifista fructuoso, pues, en él aprendían el hombre y la mujer a adaptar sus antagonismos, y al mismo tiempo, a enseñar a sus hijos a ir en pos de la paz. ~ El libro de Urantia, 68:2:8 (765.5)
Aunque las instituciones religiosas, sociales y educacionales son esenciales para la supervivencia de la civilización cultural, la familia es el civilizador magistral. El niño aprende la mayor parte de la esencia de la vida de su familia y de los vecinos. ~ El libro de Urantia, 82:0:2 (913.2)
La familia es el canal por el cual fluye el río de la cultura y del conocimiento de una generación a la otra. ~ El libro de Urantia, 84:0:2 (931.2)
La familia es la unidad fundamental de la fraternidad en la que padres e hijos aprenden esas lecciones de paciencia, altruismo, tolerancia e indulgencia que son tan esenciales para la realización de la hermandad entre los hombres. ~ El libro de Urantia, 84:7:28 (941.9)
¿Qué es la hermandad del hombre?
La fraternidad de los hombres está basada en la paternidad de Dios. ~ El libro de Urantia, 134:4.1 (1486.4)
La hermandad del hombre está, después de todo, basada en el reconocimiento de la paternidad de Dios. La manera más rápida de realizar la hermandad del hombre en Urantia consiste en efectuar la transformación espiritual de la humanidad de hoy en día. ~ El libro de Urantia, 52:6.7 (598.2)
La paternidad es la relación de la cual deducimos el reconocimiento de la hermandad. ~ El libro de Urantia, 16:9.14 (196.10)
El propósito final del progreso humano es el reconocimiento reverente de la paternidad de Dios y la materialización amante de la hermandad del hombre. ~ El libro de Urantia, 143:1.4 (1608.1)
Si cada mortal pudiese volverse tan sólo el objeto de un afecto dinámico, este virus benigno del amor llenaría muy pronto la corriente sentimental de emoción de la humanidad hasta tal punto que toda civilización estaría comprendida por el amor y ésa sería la realización de la hermandad del hombre. ~ El libro de Urantia, 100:4:6 (1098.3)
¿Qué es el reino de los cielos?
El reino de los cielos no es un orden social ni económico; es una fraternidad exclusivamente espiritual de los individuos que conocen a Dios. Es verdad que tal hermandad es en sí misma un nuevo y sorprendente fenómeno social que produce asombrosas repercusiones políticas y económicas. ~ El libro de Urantia, 99:3.2 (1088.3)
El reino del cielo no es material ni meramente intelectual; es un enlace espiritual entre Dios y el hombre. ~ El libro de Urantia, 134:4:2 (1486.5)
Dios es espíritu, y Dios dispensa un fragmento de su ser espiritual para que resida en el corazón del hombre. Espiritualmente, todos los hombres son iguales. El reino del cielo no reconoce castas, clases, niveles sociales ni grupos económicos. Todos vosotros sois hermanos. ~ El libro de Urantia, 134:4.7 (1487.4)
Las llaves del reino de los cielos son: sinceridad, más sinceridad, y más sinceridad. La elección moral más elevada es la elección del valor más alto posible, y siempre —en cualquier esfera, en todas ellas— eso consiste en elegir hacer la voluntad de Dios. ~ El libro de Urantia, 39:4.14 (435.7)
«Juan vino a predicar arrepentimiento para prepararos para el reino; ahora yo he venido a proclamar la fe, el regalo de Dios, como el precio de entrada en el reino del cielo. Si únicamente creéis en que mi Padre os ama con un amor infinito, ya estáis en el reino de Dios». ~ Jesús, El libro de Urantia, 137:8:17 (1537.4)
¿Cómo puedo vivir como Jesús?
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Vivió la verdad, incluso al enseñarla. Él fue la verdad. Se vio restringido en su proclamación de la verdad salvadora por su generación, aunque dicha sinceridad a veces le causó dolor. Era incondicionalmente leal a toda verdad. ~ <em>El libro de Urantia</em>, <a href="https://www.urantia.org/es/el-libro-urantia/documento-100-la-religion-e…">100:7:2 (1101.6)</a>
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Era valiente, pero jamás precipitado; prudente, pero nunca cobarde. Era comprensivo pero no sentimental; singular pero no excéntrico. Era piadoso pero no mojigato. Y tenía tanto aplomo porque estaba tan perfectamente unificado. ~ <em>El libro de Urantia</em>, <a href="https://www.urantia.org/es/el-libro-urantia/documento-100-la-religion-e…">100:7:4 (1102.1)</a>
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De Jesús se dijo con verdad: «Confiaba en Dios». Como hombre entre los hombres confiaba en la forma más sublime en el Padre en los cielos. Él confiaba en su Padre como un niñito confía en su padre terrenal. Su fe era perfecta, pero jamás presuntuosa. ~ <em>El libro de Urantia</em>, <a href="https://www.urantia.org/es/el-libro-urantia/documento-100-la-religion-e…">100:7.7 (1102.4)</a>
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«Anduvo haciendo bienes». ~ <em>El libro de Urantia</em>, <a href="https://www.urantia.org/es/el-libro-urantia/documento-100-la-religion-e…">100:7.8 (1102.5)</a>
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¿Existe el verdadero amor?
Todo amor verdadero viene de Dios, y el hombre recibe el afecto divino así como él mismo dona su amor a sus semejantes. ~ El libro de Urantia, 117:6:10 (1289.3)
El verdadero amor no transige con el odio ni lo condena, sino lo destruye. ~ El libro de Urantia, 188:5:2 (2018.1)
¿Cómo funciona el perdón?
Puesto que Dios conoce todo acerca de sus hijos, es fácil para él perdonar. Cuanto mejor comprenda el hombre a su semejante, tanto más fácil le será perdonarlo, e incluso amarlo. ~ El libro de Urantia, 2:4:2 (38.2)
Si un hombre reconoce el camino del mal y se arrepiente sinceramente del pecado, entonces podrá buscar el perdón; podrá liberarse del castigo; podrá transformar la calamidad en bendición. ~ El libro de Urantia, 131:8:5 (1452.3)
El Padre en el cielo te ha perdonado aun antes de que hayas pensado en pedírselo, pero dicho perdón no es asequible en tu experiencia religiosa personal hasta tanto no perdones tú a tus semejantes. ~ El libro de Urantia, 146:2:4 (1638.4)
Cuando perdonas a tu hermano en la carne, creas de esa manera en tu alma la capacidad para recibir la realidad del perdón de Dios por tus errores. ~ El libro de Urantia, 170:2:23 (1861.5)
¿Qué es la voluntad de Dios?
Hacer la voluntad de Dios es ni más ni menos que una exhibición de la disposición de la criatura a compartir la vida interior con Dios —con el mismo Dios que ha hecho posible esa vida de valor y significado interior para la criatura. ~ El libro de Urantia, 111:5.1 (1221.2)
Todo mortal que, consciente o inconscientemente, siga la guía de su Ajustador residente vive de acuerdo con la voluntad de Dios. La conciencia de la presencia del Ajustador es conciencia de la presencia de Dios. ~ El libro de Urantia, 107:0:4 (1176.4)
Aunque no podéis observar la obra del espíritu divino en vuestra mente, existe un método práctico que os permite determinar hasta qué punto habéis puesto el control de los poderes de vuestra alma al servicio de las enseñanzas y dirección de este espíritu residente del Padre celestial, y ése es: la magnitud de vuestro amor al prójimo. ~ El libro de Urantia, 146:3.6 (1642.2)
¿Qué es la oración?
La oración es una parte del plan divino para transformar lo que es en lo que debería ser. ~ El libro de Urantia, 144:4.9 (1621.8)
«La oración ideal es una forma de comunión espiritual que conduce a la adoración inteligente. La oración verdadera es la actitud sincera en pos de los cielos para alcanzar vuestros ideales.» ~ Jesús, El libro de Urantia, 144:2.2 (1618.6)
La oración tiene el objeto de hacer que el hombre piense menos pero que comprenda más; no está hecha para aumentar el conocimiento, sino más bien para ampliar el discernimiento. ~ El libro de Urantia, 143:7.4 (1616.6)
La oración no es una técnica de escape de los conflictos sino más bien un estímulo para crecer al enfrentarse al conflicto mismo. Ora tan sólo por valores, no por cosas; por crecimiento, no por gratificación. ~ El libro de Urantia, 91:8.13 (1002.5)
Toda oración ética es un estímulo a la acción y la guía a la lucha progresiva por obtener los fines idealistas del logro del superyo. ~ El libro de Urantia, 91:4.2 (997.7)
¿Dios nos castiga?
Ningún padre afectuoso se apresura jamás en castigar a un miembro de su familia que comete un error. ~ El libro de Urantia, 54:5:4 (617.4)
«Ya no temáis que Dios castigue una nación por el pecado de un individuo; tam-poco castigará el Padre en el cielo a uno de sus hijos creyentes por los pecados de una nación...» ~ Jesús, El libro de Urantia, 145:2:8 (1630.4)
Una vez que captéis la idea de Dios como Padre verdadero y amante, el único concepto que Jesús enseñó, para ser consistentes debéis de ahí en adelante, abandonar completamente todos esos conceptos primitivos sobre Dios como monarca ofendido, gobernante rígido y todopoderoso cuyo mayor deleite consiste en sorprender a sus súbditos en el error y en asegurarse de que sean castigados debidamente, a menos que otro ser casi igual a él mismo ofrezca sufrir por ellos, morir como substituto y en su lugar. Toda la idea del rescate y de la expiación es incompatible con el concepto de Dios tal como lo enseñó y ejemplificó Jesús de Nazaret. El amor infinito de Dios no es secundario a nada en la naturaleza divina. ~ El libro de Urantia, 188:4.8 (2017.3)
Pero puedes estar seguro de una cosa: el Padre no envía aflicción como castigo arbitrario de la fechoría. ~ El libro de Urantia, 148:5:3 (1661.5)
¿Existe el infierno?
El hombre primitivo no imaginó el infierno ni castigos futuros. El salvaje consideraba la vida futura como igual a ésta, menos la mala suerte. Más adelante, se concibió un destino separado para los buenos fantasmas y los malos fantasmas —el cielo y el infierno. ~ El libro de Urantia, 86:4.7 (953.6)
Dios es el Padre; el hombre es su hijo. El amor, el amor de un padre por su hijo, se torna en la verdad central de las relaciones universales del Creador con la criatura —no la justicia de un rey que busca satisfacción en el sufrimiento y en el castigo de sus súbditos malvados. ~ El libro de Urantia, 188:5.1 (2017.9)
Recuerda siempre: la verdadera religión consiste en conocer a Dios como a tu Padre y al hombre como a tu hermano. La religión no es la creencia esclavizadora en las amenazas de castigo ni las promesas mágicas de premios místicos futuros. ~ El libro de Urantia, 99:5.2 (1091.1)
El mayor castigo (en realidad una inevitable consecuencia) de la maldad y la rebelión deliberada contra el gobierno de Dios es la pérdida de la existencia como súbdito individual de ese gobierno. ~ El libro de Urantia, 2:3.2 (36.7)
...aunque la misericordia sea así de preciosa y tan amorosamente otorgada, tu crédito individual está siempre muy en exceso de tu habilidad para agotar la reserva si eres sincero en tu propósito y honesto en tu corazón. ~ El libro de Urantia, 28:6.7 (314.6)
¿Está mal querer adquirir riquezas materiales?
No hay pecado ninguno en tener posesiones honestas en la tierra, siempre y cuando tu tesoro esté en el cielo, porque donde esté tu tesoro, allí también estará tu corazón. ~ El libro de Urantia, 165:4:5 (1821.5)
La riqueza nada tiene que ver directamente con el ingreso en el reino del cielo, pero el amor por la riqueza, sí. Las lealtades espirituales del reino son incompatibles con la servidumbre a los ídolos materialistas. ~ El libro de Urantia, 163:2:10 (1803.1)
Jesús advirtió frecuentemente a sus seguidores contra la codicia, declarando que «la felicidad de un hombre no consiste en la abundancia de sus posesiones materiales». ~ El libro de Urantia, 140:8.17 (1581.4)
Los que están seguros de la salvación estarán eternamente libres de la lujuria, la envidia, el odio y las ilusiones de la riqueza. ~ El libro de Urantia, 131:3:4 (1447.1)
Ningún hombre de noble corazón podrá dedicarse a acumular el poder de la riqueza mediante la esclavización o la explotación injusta de sus hermanos en la carne. ~ El libro de Urantia, 132:5:18 (1464.2)
¿Cómo ama Dios?
El amor es la característica dominante de todas las relaciones personales de Dios con sus criaturas.
~ El libro de Urantia, 2:5.12 (40.4)
Dios es intrínsecamente generoso, naturalmente compasivo, y sempiternamente misericordioso. Y no es necesario jamás que se ejerza ninguna influencia sobre el Padre para suscitar su benevolencia.
~ El libro de Urantia, 2:4.2 (38.2)
Dios ama a cada individuo como hijo individual de la familia celeste.
~ El libro de Urantia, 12:7.8 (138.3)
El amor divino no solamente perdona las faltas; las absorbe y realmente las destruye.
~ El libro de Urantia, 188:5.2 (2018.1)
¿Está Dios dentro de mí?
No sólo existe la criatura en Dios, sino que Dios también vive en la criatura. «Sabemos que en él moramos porque vive en nosotros; nos ha dado su espíritu. El don del Padre del Paraíso es el compañero inseparable del hombre». «Es el Dios siempre presente y que lo abarca todo». «El espíritu del Padre sempiterno se oculta en la mente de todos los hijos mortales». «El hombre sale a buscar un amigo y ese mismo amigo vive dentro de su propio corazón». «El verdadero Dios no está lejos; es parte de nosotros; su espíritu habla desde dentro de nosotros». «El Padre vive en el hijo. Dios está siempre con nosotros. Es el espíritu guiador del destino eterno». ~ El libro de Urantia, 3:1.4 (45.2)
El mundo está lleno de almas que se mueren de hambre en la presencia misma del pan de la vida; los hombres mueren buscando a Dios, sin ver que él mora en ellos. ~ Jesús, El libro de Urantia, 159:3.8 (1766.4)
Dentro de vosotros mora un fragmento del Padre Universal, y por lo tanto vosotros estáis emparentados con el Padre divino de todos los Hijos de Dios. ~ El libro de Urantia, 40:6.8 (448.7)
«¿Acaso no comprendes que Dios reside dentro de ti?, ¡que se ha hecho como eres tú para que pueda hacerte como es él!» ~ Jesús, El libro de Urantia, 148:6.10 (1664.2)
Mientras allí permanecían, de pie a la luz de la luna, Jesús continuó: «En la mente de cada ser humano vive un espíritu divino, la dádiva del Padre celestial. Este buen espíritu lucha constantemente por conducirnos a Dios, por ayudarnos a encontrar a Dios y a conocer a Dios.» ~ El libro de Urantia, 133:3.7 (1472.6)
¿Somos inmortales?
Los ángeles están tan cerca de ti y se preocupan tan sinceramente por ti que en sentido figurado "lloran por tu intolerancia y terquedad deliberadas". Los serafines actúan en tu nombre con total independencia de tus llamamientos directos; están ejecutando los mandatos de sus superiores y, por lo tanto, funcionan independientemente de sus caprichos pasajeros o cambios de humor. Esto no implica que no puedas hacer sus tareas más fáciles o más difíciles, sino más bien que los ángeles no están directamente interesados en tus llamamientos ni en tus oraciones.
~ El Libro de Urantia, 113:5.2 (1246.1)
Los ángeles desarrollan un afecto permanente por sus asociados humanos; y si pudieras visualizar a los serafines, desarrollarías un cálido afecto por ellos.
~ El Libro de Urantia, 113:2.5 (1243.2)
¿Cuál es nuestro destino final?
Esta posibilidad de alcanzar la perfección divina es el destino final y certero de todo progreso espiritual eterno del hombre. ~ El libro de Urantia, 1:0:4 (22.1)
La relación de Dios con el individuo Dios no es sólo el determinador del destino; es el destino eterno del hombre. ~ El libro de Urantia, 5:4.3 (67.1)
El Paraíso es único en el sentido de que es el dominio del origen primordial y la meta final de destino de todas las personalidades espirituales. ~ El libro de Urantia, 11:9.1 (126.6)
La identificación con el espíritu constituye el secreto de la supervivencia personal y determina el destino de la ascensión espiritual. ~ El libro de Urantia, 40:5:4 (445.5)
Este Dios único es nuestro Hacedor y el último destino del alma. ~ El libro de Urantia, 131:4:2 (1448.1)
¿Cuál es el significado de la vida?
La meta trascendente de los hijos del tiempo es encontrar al Dios eterno, comprender la naturaleza divina, reconocer al Padre Universal. Las criaturas que conocen a Dios tienen una sola ambición suprema, un solo ardiente deseo, y ése es llegar —como son en sus esferas— a ser semejantes a como es él en su perfección paradisiaca de personalidad y en su esfera universal de supremacía recta. Del Padre Universal que habita la eternidad ha emanado el mandato supremo: «Sed vosotros perfectos, así como yo soy perfecto». ~ El libro de Urantia, 1:0:3 (21.3)
Este magnífico mandato universal de esforzarse por alcanzar la perfección de la divinidad es el deber principal, y debería ser la más alta ambición, de toda la creación de criaturas forcejeantes del Dios de perfección. Esta posibilidad de alcanzar la perfección divina es el destino final y certero de todo progreso espiritual eterno del hombre. ~ El libro de Urantia, 1:0:4 (22.1)
Entonces el Maestro, volviéndose a todos ellos, dijo: «No os preocupéis si no conseguís captar el pleno significado del evangelio. Vosotros no sois sino finitos, hombres mortales, y lo que yo os he enseñado es infinito, divino y eterno. Sed pacientes y valerosos porque ante vosotros se abren las eras eternas en las que continuaréis vuestro logro progresivo de la experiencia de volveros perfectos, así como vuestro Padre en el Paraíso es perfecto». ~ El libro de Urantia, 181:2:25 (1961.4)
Lo que dicen las lectoras
«Lo que más cambió para mí después de leer el libro fue que mi amor por Dios creció. Saber que un fragmento de Dios está en mi corazón me ha dado una gran sensación de seguridad y me ha llevado a profundizar en mi relación con Dios.»
Yeesook Yoon, South Korea
“Nunca más me preocuparé por hablar con grupos de personas de diversos orígenes religiosos. Sabemos que los islamistas y los cristianos han levantado fuertes barreras entre ellos y otras religiones, pero las enseñanzas del Maestro, tal como se revelan en El Libro de Urantia, eventualmente vencerán a todos”.
Nugroho Widi, Indonesia
«El Libro de Urantia quitó el velo que había cubierto mi mente entonces, permitiéndome una comprensión de Dios -primero el Dios interior, luego el Dios exterior, y finalmente el Dios en la diversidad más allá de la personificación religiosa.»
Obol Sunday Jimmy, Uganda
«No encuentro palabras para expresar la sobrecogedora emoción que me evoca mirar hacia el cielo austral, entre las constelaciones de Sagitario y Escorpio, con la reconfortante conciencia de que estoy mirando hacia el Paraíso, la lejana residencia del Padre Universal».
Zwelakhe “Patrick” Kubheka, South Africa
«Cuando encontré El libro de Urantia, mi vida estaba en una encrucijada; la religión, la ciencia, la filosofía y toda la literatura de la nueva era no podían llenar el vacío que crecía dentro de mí. Mis oraciones fueron escuchadas.» (Quebec, Canadá)
«Durante más de 25 años he buscado entre las religiones y filosofías orientales y occidentales hasta que encontré El libro de Urantia, que las sintetiza todas.» (España)
«Familiarizarme con el libro tuvo el sorprendente efecto de consolidar, en lugar de socavar, la experiencia y el conocimiento que la vida ya me había dado. El libro de Urantia</0> combinó de manera maravillosa mis pensamientos e ideas descoordinados en una imagen nueva y unificada del universo, y ha complementado, ampliado, profundizado y agrandado de manera fundamental esa imagen.» (Alexander, Berdyansk, Ucrania)
«Las religiones tradicionales me dejaban insatisfecho. Dios era incoherente o impersonal. Aquí, todas las piezas encajan. Un Dios para todos, un plan glorioso para la humanidad. Llegarás a enamorarte del universo.» (Merrick, NY, EE. UU.)
“I have been reading The Urantia Book for the past four years. I lost my beloved wife eight months ago. God gave me a positive assurance through the pages of this book, so authentic, about the heavenly realm.”—Kingdom of Bahrain
«Después de leer El libro de Urantia, mi vida adquirió un nuevo y grandioso significado. Ya no hay nada que temer y todo por lo que esperar. Si solo lees un libro, que sea esta quinta revelación de época.» (Aylesbury, Inglaterra)
«Soy lector de El libro de Urantia desde hace más de 25 años. Uno de mis placeres ha sido correlacionar este maravilloso tomo con experiencias de la vida real para seguir validando la gran sustancia del libro.» (Elko, NV, EE. UU.)
«Buscaba la verdad desde que tenía veinte años. Toda mi familia es católica pero yo quería más respuestas; no me gustaban los dogmas. Me había enamorado de Jesús... ¿cómo podría la Iglesia ser toda la verdad? Finalmente El libro de Urantia me encontró... cada vez que lo leo, me llena el corazón.» (Chile)
«El libro de Urantia hace posible que viva cada día libre de miedos e incertidumbres debilitantes. Ahora sé que hay un orden y un plan divinos para el universo y para mi vida, y sé que estoy constantemente bajo el cuidado de mis ángeles guardianes.» (Eugene, OR, EE. UU.)
«Cuando encontré El libro de Urantia tras una larga búsqueda interior, encontré la respuesta a mis preguntas sobre el propósito de la vida y el futuro después de la muerte. El libro combinaba ciencia, filosofía y religión. Era tan lógico, tan inteligente y el universo estaba tan lleno de amor ¡que fue una verdadera revelación! Por fin todo tenía sentido. El libro se convirtió en parte de mi vida, la ennobleció y me hizo aprender a amar mucho más a mis semejantes.» (Francia)
«Cuando era niña, miraba las estrellas y me preguntaba: ¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Hay vida ahí fuera? ¿Qué sucede después de morir? Esperaba que tal vez cuando muriera mis preguntas tendrían respuesta. Encontrar El libro de Urantia me mostró que las respuestas ya están aquí.» (Boulder, CO, EE. UU.)