La belleza de compartir: la siembra de las enseñanzas en Indonesia
La belleza de compartir: la siembra de las enseñanzas en Indonesia
De Betty Tresnawaty, Yakarta (Indonesia)
Mi sed espiritual se sació hace dos años cuando descubrí El libro de Urantia. Un amigo me lo dio y comencé a estudiarlo secretamente. Estudiar abiertamente El libro de Urantia en Indonesia puede ser muy arriesgado, pues la mayoría de los indonesios son musulmanes. Algunos miembros de mi familia supieron que estaba leyendo El libro de Urantia y llevaron al límite nuestra relación, especialmente la relación con mi hermana. Pero todo eso no es obstáculo para mí. No estoy intentando ganar un concurso de popularidad. Lo importante es que soy conocida, e incluso popular, entre los ángeles y otros amigos invisibles.
Los valores de El libro de Urantia son aplicables a nuestra vida diaria. No sólo contiene historia, cosmología, ciencia y religión, sino enseñanzas y orientación para la vida de cada día. Pienso que los verdaderos significados y valores que puedes obtener de la lectura de El libro de Urantia no proceden de leer el libro sólo con ojos humanos, sino de leer el libro atentamente, de examinar las enseñanzas profundamente y discernirlas espiritualmente para, a continuación, implementarlas en nuestra vida.
¡El libro de Urantia ha cambiado mi vida! Mi visión de la vida ya no es estrecha y escéptica. Soy más feliz y me siento cómoda comunicándome e interactuando con gente de diferentes entornos. Hay una belleza difícil de describir. Siento el amor de Dios dentro de mí, y siento que irradia de mí y a mi alrededor.
«Levántate y resplandece, porque ha venido tu luz, y la gloria del Señor se ha levantado sobre ti. La oscuridad puede cubrir la Tierra y las profundas tinieblas envolver a la gente, pero el espíritu del Señor se levantará sobre ti y verán que la gloria divina te acompaña. Incluso los gentiles vendrán hacia esta luz, y muchos grandes pensadores se rendirán ante su resplandor.» (1629.3) 145:2.2
Siento que es importante compartirlo para que otras personas experimenten los beneficios que yo he obtenido. Qué maravilloso sería si todos los habitantes de la Tierra absorbieran los valores de El libro de Urantia y vivieran las enseñanzas. Al hacerlo, la vida sería más feliz, más pacífica y mejor. Además, si compartimos con los demás esta felicidad, todos la sentiremos. Los seres humanos no podemos ser felices solos.
“La felicidad y la alegría tienen su origen en la vida interior. No podéis experimentar una verdadera alegría completamente solos. Una vida solitaria es fatal para la felicidad. Incluso las familias y las naciones disfrutarán más de la vida si la comparten con las demás.” (1220.6) 111:4.7
Qué bello podría ser el mundo si no hubiera más violencia, guerra u otros vicios que hacen inestable a nuestro planeta.
Basándome en mi experiencia de los últimos dos años, puedo difundir los valores de El libro de Urantia a través del ejemplo de mi buena conducta. Mientras tanto, puedo invitar a otros a que vengan y lean El libro de Urantia y a que se unan a algunos de los demás programas que ofrezco de manejo del estrés, autodescubrimiento y cooperación con el Ajustador del Pensamiento. Desarrollé estos programas basándome en ideas de El libro de Urantia.
“La mente es vuestro buque, el Ajustador es vuestro piloto, la voluntad humana es el capitán. El dueño del navío mortal debería tener la sabiduría de confiar en el piloto divino para que guíe su alma ascendente hacia los puertos morontiales de la supervivencia eterna. La voluntad del hombre sólo puede rechazar la guía de un piloto tan amoroso por egoísmo, pereza y maldad, y hacer naufragar finalmente su carrera como mortal en los nefastos bancos de arena del rechazo de la misericordia y en los arrecifes del abrazo del pecado. Con vuestro consentimiento, este piloto fiel os llevará de manera segura a través de las barreras del tiempo y de los obstáculos del espacio, hasta la fuente misma de la mente divina e incluso más allá, hasta el Padre Paradisiaco de los Ajustadores.” (1217.4) 111:1.9
De modo que difundo las enseñanzas mediante estos programas de capacitación y, paso a paso, las enseñanzas se difunden entre muchas personas sin que yo mencione el libro.
Hace un tiempo, recibí diez libros de la Fundación Urantia (gracias a Tamara por enviarlos), y di los libros a mis colegas de la universidad donde estoy estudiando el doctorado. Creo que mis colegas estarán más receptivos a leer y estudiar El libro de Urantia porque son inteligentes, perspicaces y analíticos. Además, mi tesis pertenece a El libro de Urantia. Espero que un día más y más personas encuentren el libro a través de mi presentación académica después de que la investigación de mi tesis haya terminado. Mi misión es difundir la luz y convertirme en la sal de la Tierra.